Apego y salud mental en adolescentes
Por lo general, la ciencia siempre ha puesto la lupa en analizar sobre cómo el apego afecta a niños y adultos/as. Pero, ¿pueden los diferentes estilos de apego influir en la salud mental de los/as jóvenes? Si entendemos que la adolescencia es un periodo de transición que se caracteriza por cambios acelerados y que, por ende, requiere una atención especial para el bienestar integral.
La adolescencia es una etapa única y formativa, que se caracteriza por su intensidad y cambios. Además, es en este periodo de la vida que ocurre una creciente maduración psicológica, física y social que lleva al ser humano a transformarse en un adulto/a. Todos estas variaciones corporales y emocionales son normales si tenemos en cuenta que están expuestos a fuertes alteraciones hormonales que los hacen sentir en crisis con el mundo. Por lo mismo, los factores que determinan la salud mental del adolescente en cada momento son múltiples, sin embargo, es necesario precisar que no siempre los problemas en esta índole constituyen a una psicopatología, ya que muchas veces, estos problemas de salud mental pueden ser variaciones normales en ciertos períodos del desarrollo. Respecto a los orígenes de estas problemáticas, en la actualidad existe un consenso respecto a que las manifestaciones psicopatológicas en la adolescencia subyacen una compleja integración de los sistemas biológicos, psicológicos y sociales. “Hace algunas décadas la discusión estaba centrada en que si era la genética o el ambiente la causa de la psicopatología en la adolescencia”, dice Dr. Cristián Pinto Cortez, Investigador y Académico de la Escuela de Psicología y Filosofía de la Universidad de Tarapacá, “Hoy existe cada vez más hay evidencia científica respecto a que los factores causales responden a la integración de estos dos elementos, es decir, de la genética y el ambiente en conjunto, incluyendo la influencia de las relaciones tempranas y las experiencias adversas vividas durante la infancia”.
Por lo general, la mayoría de las publicaciones y estudios sobre la relación de apego y psicopatología están concentradas en la población infantil, y posteriormente, en adultos/as. Recordemos que el psicólogo John Bowlby (1958) elaboró la Teoría del Apego, que se traduce en el vínculo emocional que genera el niño/o con sus cuidadores y que le entregan la seguridad emocional indispensable para un buen desarrollo de la personalidad a lo largo de la vida. Pero, ¿existe un vínculo entre el apego y el desarrollo de psicopatología en la adolescencia? Para resolver esta pregunta Dr. Cristián Pinto Cortez en colaboración con Marta Beyzaga, María Fernanda Cantero, Xiomar Oviedo y Verónica Vergara (2018), elaboraron un estudio en la zona norte de Chile.
En dicha investigación se describen los patrones de apego en una muestra no-clínica de adolescentes chilenos/as y su relación con sintomatología psicopatológica. Los y las participantes fueron 1042 adolescentes escolarizados entre 13 y 17 años (M =14.83; DT = 1.19; 57.4% eran mujeres) de Arica en Chile. El estilo de apego se evaluó con la Escala de Experiencias en Relaciones Cercanas (ECR-RS) y la sintomatología psicopatología con el Inventario Breve de Síntomas (BSI). Los resultados muestran una gran proporción de adolescentes con estilos de apego inseguro, concretamente estilo de apego evitativo. Se determinó que los jóvenes catalogados con modo de apego temeroso mostraron una mayor presencia de señales de sintomatología psicopatológica como somatización, obsesión-compulsión, depresión, ansiedad, hostilidad, ansiedad fóbica, paranoia, sensibilidad interpersonal y psicoticismo. En consecuencia, se establece que los adolescentes chilenos de la ciudad de Arica presentan con mayor frecuencia estilos de apegos inseguros, siendo el apego temeroso el que asocia con superior reiteración con sintomatología psicopatológica. Estos resultados apoyan el modelo de desarrollo de psicopatología fundado en la influencia de las experiencias tempranas con los cuidadores y cuidadoras y, además, entregan evidencia para la planificación y ejecución de programas de prevención de psicopatología.
Otro estudio en esta línea se centró en estilo de apego y psicopatología en adolescentes víctimas de maltrato infantil (Muela, Torres & Balluerka; 2011). En esta instancia participaron 69 jóvenes víctimas de esta situación que se hallaban en residencias y hogares de menores, 75 adolescentes afectados por maltrato infantil que se encontraban en contexto de riesgo de desamparo y 174 jóvenes que no habían sufrido abusos. Los resultados indican que experimentar daños físicos o psicológicos antes de los 13 años representa un factor de riesgo para mostrar un apego inseguro y psicopatología en la adolescencia. Además, se encontraron algunas diferencias en psicopatología entre los dos grupos de adolescentes víctimas de maltrato infantil, las cuales podrían ser consecuencia de las distintas estrategias defensivas asociadas al estilo de apego constatadas entre ambos grupos.
Por todo lo anteriormente mencionado, es de gran importancia conocer la teoría del apego para poder evaluar e intervenir de una manera mucho más efectiva, tanto con niños, adolescentes, como en el mundo adulto, puesto que la evaluación de dicho vínculo nos permite tener más información sobre la etiología del problema.
Recomendación para la prevención y contención de estas patologías
Promover el bienestar psicológico de los adolescentes y protegerlos de experiencias adversas y factores de riesgo que puedan afectar a su capacidad para desarrollar todo su potencial es esencial para su bienestar presente y futuro. En esta materia un aspecto clave para la prevención de los problemas de salud mental en la adolescencia es la detección temprana. “Para esto es necesario, que tanto los cuidadores, educadores, profesionales de la salud y protección de salud y protección de la infancia tomen medidas como la derivación a especialistas o a programas de apoyo psicosocial cuando identifiquen en la primera infancia o en la adolescencia conductas o síntomas que sean atípicos de la etapa evolutiva que atraviesa el niño, niña o adolescente”, dice Dr. Pinto Cortez.
En cuanto a la contención de patologías según el Académico de la Universidad de Tarapacá señala que es clave que el contexto familiar o de cuidado sea un espacio en que el o la adolescente pueda expresar sus emociones , sentimientos, pensamientos o causas del sufrimiento. Sin embargo, si esto no es posible por diversas razones como no tener las herramientas para sobrellevar estas problemáticas se sugiere consultar a profesionales especialistas en salud mental de adolescentes.